El poder del control emocional
Rediseña lo que quieres ser con el control de tus emociones
Muchas veces nos sentimos frustrados porque no conseguimos hacer o ser lo que ideamos en su momento en nuestra cabeza generando emociones que nos frustran nos enfadan y hasta nos enferman, cambiando nuestro carácter, nuestra forma de ver la vida o las situaciones. Las emociones son como una taza de café caliente para disfrutarlo hay que dejarlo enfriar. Por eso ser conscientes de tus emociones y de las situaciones y causas que te las provocan es fundamental para poder manejarlas, pero debes hacerlo en frío, antes de que ya seas presa de tu emoción. Este artículo reflexiona sobre su impacto e importancia en el bienestar y el control de nuestra vida
Habilidades emocionales
El control de emociones es una de las habilidades propias de la Inteligencia Emocional o de las Habilidades Emocionales, porque como toda habilidad con práctica se puede adquirir.
La clave está en que cuanto antes la aprendamos menos barreras que derribar. Sin embargo, no es algo que habitualmente nos enseñen en el colegio o la universidad. Conocerlas es una parte fundamental para liderar nuestra propia mente, nuestra propia vida. Somos básicamente emocionales y no aprender a manejar nuestras propias emociones es un riesgo para ser víctima de pensamientos espirales y de emociones irracionales.
Los sentimientos, las emociones, alteran el pensamiento, ya que cuando estamos enfurecidos, o enamorados, la razón y el pensamiento se distorsionan. La emoción es la respuesta afectiva ante una situación que produce inestabilidad y perturbación. Emociones básicas como el hambre, el miedo, la ira, el odio, la tristeza, la excitación forman parte de nuestra naturaleza, tanto si queremos como si no. Por lo que, la manera en la que actuamos ante este tipo de comportamientos, depende de cómo nos manejemos con las emociones.
Esto no significa anular estas emociones, sino saber cómo manejarlas cuando estos estados anímicos cuando son poco deseables ante una determinada situación.
Las personas responden a las emociones de diferentes maneras, algunos son más sensibles y se sienten más afectados que otros. Si nos dejamos arrastrar por la emociones, de nada vale la inteligencia, porque se puede actuar de forma impulsiva sin reflexionar ni poder discernir.
Tal vez no podamos elegir nuestras emociones, pero sí podemos conducir nuestras reacciones emocionales de forma inteligente.
Cuando controlas tus emociones mejora tu vida
- Mejora del rendimiento en el trabajo.
- Mejora tu vida personal.
- Mejoras tu adaptación a los cambios y a las situaciones límite, en las que te ves seriamente amenazada.
- Mejoras tu nivel de estrés.
- Propicias un equilibrio fisiológico (respiración, frecuencia cardiaca y presión arterial).
- Te ayuda a reconocer tus propios sentimientos y los ajenos.
- Te da capacidad de auto control emocional y equilibrio.
- Te ayuda a desprenderte de las sentimiento negativos, usando la razón y la creatividad.
Reconocer y manejar nuestras emociones es una manera de rediseñar como queremos ser y la actitud que queremos tener ante la vida. Toma conciencia y empieza el cambio.
